
Recientemente, la plataforma Star, incluida dentro de Disney+, ha estrenado una serie llamada Pam y Tommy, donde se relata la relación entre dos figuras de los 90. Pamela Anderson destacó por su papel en Los Vigilantes de la Playa, convirtiéndose en una verdadera leyenda sexual en aquella época. Tommy Lee era el batería de los míticos Motley Crue, una de las bandas de rock más polémicas de los años 80. Su encuentro fue como un chispazo y se casaron a los pocos días de conocerse. Su relación pasó por momentos muy oscuros, pero también alegres. Sin embargo, lo que más se recuerda de aquel idilio, y lo que centra también la trama de la ficción de Star, es la filtración del video sexual de la luna de miel de la pareja. Aquel vídeo, obtenido de manera ilícita por un carpintero que quería cobrarse su venganza contra Lee, terminó en Internet, en una era dónde la red todavía estaba creciendo.
Fue de hecho el primer vídeo sexual que se volvió viral, por tratarse de Pamela y de Tommy, y abrió una gran brecha ante la imposibilidad de frenar un contenido así cuando está ya en la red. La serie también tiene tramas paralelas en las que nos muestran, precisamente, el crecimiento del porno dentro de la incipiente Internet. En una escena, un joven empresario le ofrece a Randy, el poseedor del vídeo sexual, una gran suma por lanzarlo en la red. El tipo afirma que está ganando mucho dinero con webcams para adultos. Randy, sin embargo, le desprecia diciendo que eso no tienen ningún futuro, porque la conexión no va para nada fluida. En parte, el personaje de Seth Rogen lleva razón, pero se equivocaba en abocar al fracaso un negocio como el de las webcams online. De hecho, veinticinco años después, muchas modelos y chicas amateurs siguen ganándose la vida gracias a este sistema, que fue pionero en el porno online. Las cosas han cambiado bastante desde entonces, pero la motivación de las chicas siempre es la misma: conseguir dinero de una forma rápida y divertida. Por eso no es de extrañar que muchas de estas webcammers acaben también dando el paso al mundo de la prostitución.